«Una normativa de rango andaluz prohíbe taxativamente la presencia de perros y otros animales en las playas durante la temporada alta, pero no ocurre lo mismo con el periodo comprendido entre octubre y mayo», apuntó el concejal de la Presidencia, Miguel González -Berral, quien también destacó que esta iniciativa se realizará «dada la demanda de muchos vecinos en este sentido».
El representante municipal resaltó que la modificación buscaría regular la presencia siempre fuera de la temporada de baño, «y en todo caso contemplaría también sanciones si no se recogen los excrementos de las mascotas o éste molesta a otros ciudadanos».
Actualmente la ordenanza de playas responde a un «reglamento tipo», según especificó ayer el edil, de manera que lo que busca el equipo de gobierno es adaptarlas a condiciones específicas del municipio, situación que se debatirá en el próximo pleno.
Por otra parte y a petición de uno de los grupos en la oposición, Alternativa Mijeña, se va a estudiar la posibilidad de reducir el tope máximo de sanción económica que se contempla para las sanciones catalogadas como leves. En estos momentos, el reglamento recoge hasta un máximo de 750 euros aunque la propuesta del grupo pasa por limitarlas hasta los 500 euros.
Esta novedad saltó a la palestra durante el debate plenario que aprobó una modificación en el articulado de la ordenanza de convivencia ciudadana, donde se recoge la presencia de mascotas en la playa, situación que contempla también el reglamento específico para el litoral. Así las cosas, se aprobó eliminar del primer articulado los apartados relacionados con este asunto, simplificando con ello la regulación municipal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario